¿Cómo se mantiene atado un elefante a un taburete?

Espero que esta fábula les ayude a entender:

Cuando el elefante es todavía un cachorro, el animal es atado con una cadena a un árbol. Al principio se debate, tira de la cadena, llora. Se desespera al verse atado. Es posible incluso que llegue a hacerse daño por ello.
Si la atadura y el árbol son firmes, de nada sirve su dolor y su esfuerzo. Solo le lleva a sentirse frustrado y un mayor dolor. Con el tiempo, se cansa, deja de luchar contra la presa. Cuando se le pone la cadena, se somete. Acepta su destino. Espera paciente la llegada de su amo, la única posibilidad de liberación que cree real.
Cuando el elefante es adulto, y ya ha interiorizado el estarse quieto cuando es atado, solo basta un taburete y un fina cuerda para mantenerlo inmóvil.

La cadena ya no es necesaria.

5 comentarios

[ISAAC GUILLEN - 13 de agosto de 2006 - 16:24]

No es que, el elefante, cansado ya, y despues de luchar contra su atadura...haya aceptado, en su mente y corazon tal tipo de vida,quizas internaizo su situacion, pero el sabe,que nacio libre...Quizas espera la llegada de su amo con actitud sumisa, porque atado como esta no puede buscar su alimento como el quisiera,pero su espiritu reniega por no comer lo que el quisiera...Pero ya no esta el arbol,en su lugar esta el taburete.,Ya no esta la cadena, en su lugar, la fina cuerda....Si bien es cierto,ya no hace falta la cadena, porque el esta sumiso, pero eso es lo que el esperaba,ahora solo hace falta que el se de cuenta,y bolvera ha luchar.....Al ser humano quizas lo aten diferentes cituasiones, pero si sabe ver lo que otros no., volvera ha luchar. no se trata de ser negativo,o realista, solo se trata de saber que tienes un inmenso potencial dentro ti, para hacer y desaser., y la pacincia para esperar tu tuempo, y el corage para romper tu atadura.

[SePhIrAhDaAtH - 01 de septiembre de 2004 - 03:35]

Es bien feo que las historias acaben siempre mal, pero en realidad cada uno propicia tal hecho a partir de las desiciones tomadas, de la educaciòn que se recibe como imposición social, etc.

No obstante si el elefante se queda quieto hasta la llegada de su amo, a quien vincula con la libertad (y la restricción ) de su capacidad deambulatoria, es porque este ya se ha acostumbrado, ya ha internalizado tal patrón de conducta. Si lees con detenimiento el relato, verás que el elefante ya adulto no necesita ser encadenado efectivamente, pues esta condicionado por el entrenamiento recibido para permanecer quieto hasta que su amo le permita moverse.-

Tal sucede con los seres humanos y la educacion que éstos reciben. Los condiciona para permanecer tal como lo requiere la sociedad a fin de emplearlos en un determinado proyecto social; anulando en ellos la capacidad de desear, de anhelar.
De vivir.

Y no soy negativa, Berenice; soy realista.-

[DCLXVI - 23 de agosto de 2004 - 02:37]

Caballeros, he visitado el enlace de Berenice.

Encantador! Como su comentario!

[Berenice - 16 de agosto de 2004 - 11:15]

aqui estoy de nuevo, sin pretender ser pesada, es que ayer no me dio tiempo a segir...Qizás muchos critiquen mi comentario de idealista, pero s que me niego a que las historias siempre acaben mal, y gane el que no se lo merce. Sé que la realidad es muy distinta, pero si nuestra aptitud no es positiva a un cambio constructivo, nunca remontaremos el vuelo. Quizás la mayoria d las veces salga mal,pero aunque solo una vez el resultado sea positivo, esta merece la pena, no?...Bueno, es que trato de ser positiva, y por mi futura profesión, me conviene...Saludos

[Berenice - 15 de agosto de 2004 - 22:25]

una fabula demasido real, en los dias que corren...En cierto modo creo que todos hemos tenido esa sensación en un momento de nuestra vida, en mayor o menor grado, aunque las neurosis de cada uno son significativas y no menos importantes que las de otros...Pero bueno, soy positiva, y mi final para esta fabula es que el elefante ,con los años no se limitó, como aparentaba, a asumir su cruel e injustamente impuesto destino, sino que creció en silencio y cuando tubo la fuerza suficiente para asumirse a sí mismo libre, tiró el taburete muy lejos ayudado de la fina cuerda...